Oxitocina, la hormona del amor

Oxitocina, la hormona del amor

¡Os deseamos un feliz San Valentín a todos! Y ya que la temática de este blog es la ciencia, y más concretamente la Biología... Hemos decidido hacerlo dándole a conocer el amor desde el lado científico.

La hormona del amor se fabrica en el cerebro, concretamente en el hipotálamo, y se almacena en la hipófisis o glándula pituitaria. Esta glándula la almacena y la secreta a la sangre cuando es necesario. Tiene varias funciones relacionadas con  el sexo o con el parto por ejemplo. Puede funcionar de dos maneras: 

- como hormona, que lo que hace es viajar por la sangre hacia la parte del cuerpo donde provoca su efecto (por ejemplo, la secreción de leche por el pezón), 

- como neurotransmisor. En este segundo caso, lo que hace es estimular otras zonas del cerebro, y lo que provoca son respuestas en nuestro comportamiento, como la excitación sexual.

¿Por qué es la oxitocina la hormona del amor?

Según diversos estudios, cuando nos encontramos en una fase de enamoramiento, aquella en la que tenemos sentimientos muy fuertes de deseo por estar con la persona por la que estamos embelesados, nuestro cerebro presenta mayores niveles de oxitocina. La hormona del amor, tiene como efecto, al igual que otras hormonas el crear una sensación de placer. Por ello cuando nuestros niveles de oxitocina son mayores, esto nos hace sentir mejor y nos provoca el deseo de repetir la acción que estamos realizando o de mantenernos en una situación similar.

¿La oxitocina me hace estar enamorado o es mi amor el que produce la oxitocina?  La relación entre activación cerebral, secreción de ciertas hormonas y la conducta, no es unidireccional. Así, si la oxitocina nos hace tener ciertos sentimientos, nosotros sí que podemos provocar la producción de esta hormona. Es decir, que la oxitocina nos enamora, y que nuestro amor produce más aún.

Así que ya sabes, si estás enamorado no olvides agradecérselo a nuestra hormona favorita. ¡¡LOVE u OXITOCINA!!